Si existen unas tablas en el mundo del surf que han conseguido trascender y crear historia a través de su propia historia, es Bing Surfboards. Hoy en día conocidas por ser las mejores tablas de surf clásicas del mundo, han tenido un inicio diferente al que muchos puedan pensar. En su día transgresoras, detrás de ellas hay personas. Surfers como tú, que han decidido pegar un giro de 180 grados a sus vidas para, sin pretenderlo, escribir un capítulo en la historia del surf que parece no tener fin.
60 aniversario de Bing Surfboards
Este 2019 parece estar marcado de fechas especiales. Y es que nosotros también compartimos aniversario con una de las leyendas del surf. Aunque desde la modestia creamos que nos queda mucho - muchísimo - camino por recorrer, nos vamos a permitir la licencia de, desde nuestros 40 años de experiencia, hacer un resumen de lo que las tablas de surf Bing han significado para nuestro pequeño gran cosmos. Para ello, vamos a hacer un recorrido a través de imágenes de la evolución de estas tablas de surf a través de 60 apasionantes años.
Bing Copeland: Fundador de Bing Surfboards
Todo tiene un inicio. Y en este caso comienza con un grupo de chavales de Hermosa Beach, California, que pasaron parte de su infancia y adolescencia en su playa habitual admirando a los iconos de la época anhelando en que algún día, se convertirían en uno de ellos. Alternando el surf y sus primeros trabajos reparando tablas y haciendo quillas en la que fue la primera tienda de Velzy, se graduaron en su escuela natal y decidieron convertirse en socorristas para hacer dinero y así, poder viajar a lo largo y ancho del mundo en busca de olas. Hawaii estaba cerca, y no podían pasar por alto la oportunidad que se les brindaba de trabajar, vivir y surfear en lo que a mediados de los ’50 era una North Shore salvaje por explorar.
Un viaje al rededor del mundo en búsqueda de olas
Poco a poco, y de la mano de locales hawaiianos, Bing Copeland, Greg Noll, Dick Brewer y el resto de sus amigos comenzaron a introducirse en el surf de olas grandes. En parte dedicados a sus trabajos de socorristas, el resto del tiempo lo pasaban buscando y surfeando nuevas olas. Olas que de entonces desconocidas, hoy en día son auténticos iconos dentro del mundo del surf. Con un dinero ahorrado y la idea de Rick Stoner de navegar para recorrer mundo en busca de nuevas olas, Bing se embarcó rumbo a Tahití, continuando con las islas Fiji y terminando en Nueva Zelanda, dónde introdujeron en surf moderno. Un año más tarde y con sus bolsillos llenos de experiencias pero vacíos de dinero, decidieron ganarse la vida montando una tienda de surf con sus propias tablas. El inicio de Bing Surfboards.
Éxito e inicio de una nueva etapa para los Copeland
Bing Surfboards creció como la espuma. Con años de experiencia como surfer y shaper y, contando con un equipo de surfers de la talla de Dru Harrison o David Nuuhiwa por mencionar algunos. El negocio funcionaba y los surfers locales estaban encantados con sus tablas. Pero a finales de los ’60 el mercado comenzó a cambiar. El inicio del ‘hazlo tú mismo’ y la imparable tendencia por aquel entonces del ‘no logo’, comenzó a hacer mella en los grandes fabricantes. Y aunque por aquel entonces Bing Surfboards era más conocido que nunca, las ventas comenzaron a descender. Pero no fue el único motivo que hizo que Bing Copeland se replanteara su vida. Cada vez estaban más presentes las drogas en las calles de Hermosa Beach, localidad en la que nuestro protagonista había decidido asentarse con su familia. Por lo que, aunque no fue fácil, Bing decidió abandonar California y poner rumbo a Idaho. Estado en el que se presentaban nuevas oportunidades y un mejor ambiente para criar a sus hijos, pasando los inviernos entre las olas de Baja California.
La importancia del relevo generacional en Bing
Durante las décadas de los ’80 y los ’90 fue Mike Eaton quién cogió las riendas de la creatividad. Pero en la década de los 2000, en uno de los inviernos en los que los Copeland estaban surfeando en baja, un joven se acercó a hablar con Bing. Entusiasmado, hablando de surfing y shaping, se lanzó a la piscina y le propuso que si alguna vez estuviera interesado, a él le encantaría dar forma algunas de sus tablas. En uno de sus viajes a la factoría, Bing le comentó a Mike Eaton el encuentro que había tenido surfeando en Baja y este, decidió pasar el testigo al joven surfer entusiasta, que era nada más y nada menos que Matt Calvani. ¿El resto? Ya es el presente que vives cada vez que remas una ola con una tabla Bing.
Tablas Surf Shop es el distribuidor oficial de Bing Surfboards en España y Portugal. Si estás interesado en tener una tabla que pertenece a la historia del surf, puedes contactar con nosotros. Anualmente recogemos encargos que puedes personalizar.